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Publicado por Juan José
Corría el verano de 1992.
Uno de los delirios de grandeza de Eduardo Zaplana Hernandez-Soro siempre había pasado por construír un Parque de Atracciones Temático en la Comunidad Valenciana.
Una de esas coincidencias de la vida ocurrió poco tiempo después de recibir la noticia que la multinacional DISNEY apoyaba la candidatura de París y procedía la construcción de Disneyland en aquella ciudad (en detrimento de Cabanes, Castellón).
Era Agosto..., y acaeció un terrible y pavoroso incendio en la montaña de Benidorm. Hacía apenas nueve meses de la llegada a la alcaldía de Benidorm de Eduardo Zaplana, con el apoyo de una concejal tránsfuga y la sombra de una operación urbanística colosal sobrevolando la cabeza de los pobres ciudadanos.
El espectáculo fue horrible... lo aseguro. Yo estuve allí.
Tenía 19 años y nunca había visto arder 10.000 pinos adultos con tanta fuerza y descontrol. Aquella zona era conocida hasta entonces como 'la mayor pinada del Mediterráneo', y la investigación apuntó a un fuego intencionado.
En los días posteriores se interrogó a sospechosos, incluso se anunció como inminente la detención de un pirómano. Nada más se supo.
Hasta ese momento, todos los alcaldes se habían opuesto a urbanizar Sierra Cortina, que constituía el pulmón verde de Benidorm. Aunque la legislación autonómica no permitía edificar suelos forestales quemados, Zaplana declaró en 1995 (tras llegar a la presidencia de la Generalitat Valenciana) el proyecto de Terra Mítica de interés para la Comunidad Valenciana para poder eludir la normativa.
Una de esas coincidencias de la vida ocurrió poco tiempo después de recibir la noticia que la multinacional DISNEY apoyaba la candidatura de París y procedía la construcción de Disneyland en aquella ciudad (en detrimento de Cabanes, Castellón).
Era Agosto..., y acaeció un terrible y pavoroso incendio en la montaña de Benidorm. Hacía apenas nueve meses de la llegada a la alcaldía de Benidorm de Eduardo Zaplana, con el apoyo de una concejal tránsfuga y la sombra de una operación urbanística colosal sobrevolando la cabeza de los pobres ciudadanos.
El espectáculo fue horrible... lo aseguro. Yo estuve allí.
Tenía 19 años y nunca había visto arder 10.000 pinos adultos con tanta fuerza y descontrol. Aquella zona era conocida hasta entonces como 'la mayor pinada del Mediterráneo', y la investigación apuntó a un fuego intencionado.
En los días posteriores se interrogó a sospechosos, incluso se anunció como inminente la detención de un pirómano. Nada más se supo.
Hasta ese momento, todos los alcaldes se habían opuesto a urbanizar Sierra Cortina, que constituía el pulmón verde de Benidorm. Aunque la legislación autonómica no permitía edificar suelos forestales quemados, Zaplana declaró en 1995 (tras llegar a la presidencia de la Generalitat Valenciana) el proyecto de Terra Mítica de interés para la Comunidad Valenciana para poder eludir la normativa.
Tenemos que tener en cuenta que Terra Mítica era un parque temático pagado con el dinero de todos los valencianos y vendido, antes de ser pagado, a manos privadas para que se quedaran con la empresa cuando empezara a dar beneficios
de explotación, posteriores a los ya derivados de su construcción y venta.
de explotación, posteriores a los ya derivados de su construcción y venta.
Además, hasta un mono hubiera olido a cuerno quemado la sucesión de los acontecimientos: primero se quemó el bosque de pinos de manera provocada, luego se cambió misteriosamente la ley que permitía construir sobre terrenos incendiados... y luego fue el mayor negocio para los promotores inomobiliarios de la costa alicantina.
Lo dicho, hasta un chimpancé.
Siendo Eduardo Zaplana alcalde de Benidorm, se produjeron dos incendios nunca aclarados en la Partida del Moralet, donde hoy se alza el Parque Temático Terra Mítica. Como en otras ocasiones, se incumplió clamorosamente la Ley Forestal, que prohibía edificar en zonas rústicas devastadas por el fuego. En estos terrenos, con la pertinentes expropiaciones forzosas, se levantaba con todas las licencias y bendiciones poco tiempo después el mítico complejo turístico recreativo.
Yo era Vigilante Jurado en Benidorm... y tenía 19 años. Era joven. Es verdad. Pero nunca he sido tonto.
Mi abuela me dijo más de una vez "piensa mal y acertarás".
Cuando paré el vehículo en plena Autopista A-7 y observé como el fuego atravesaba la calzada con tanta fuerza y rapidez, enseguida comprendí que aquello no era normal. Intuición de primate.
FOTO 1: Foto real de 1992, de la zona afectada. Estuve en ese estado varios años, hasta que cambió por amplias avenidas y bonitos chalets.
